
Viajamos a Calama junto con otras motocicletas, nos extrañaba la afluencia de motocicletas en la carretera. Cuando llegamos a la ciudad, un “motoquero” nos hizo señas para pararnos y nos invito al “Primer encuentro de motoqueros” organizado por el Club Lobos del Desierto, era nuestro ahora amigo Víctor, que además con una hospitalidad y confianza sorprendente nos invito a hospedarnos en su casa. Esos días disfrutamos de la compañía de su familia, su hija Roxana –que tiene una hermosa y contagiosa sonrisa- y su hijo Juan y su novia Stephanie hicieron muy agradable la estancia en su casa.
En el encuentro de motoqueros, caracterizado por grandes motocicletas, al estilo Harley Davison, fuimos acreedores al premio “al motoquero que viene de más lejos” evidentemente no teníamos competencia a nuestros 11,000 kilómetros recorridos antes de llegar a Calama.
En esos días Juan y Carlos –otro amigo del Club Lobos del Desierto-, nos ayudaron con un servicio a nuestra motocicleta.
En fin, en esta ciudad y en este encuentro conocimos a verdaderos amigos, que esperamos volver a ver muy pronto.